UGT y CCOO no se cortan: gambas y copas en la Feria de Abril
Hace cuatro años, un escándalo mayúsculo salpicó a UGT. Por aquel entonces, se conoció que el sindicato había pagado en 2010 una comida con dinero público de la Junta de Andalucía que incluía viandas y barra libre de bebidas alcohólicas. Hoy, UGT mantiene su caseta en la Feria de Abril, pese al escándalo que protagonizó. CCOO también tiene una caseta para este año.
Fuentes sindicales han asegurado a OKDIARIO que, a raíz de la polémica destapada y de las acciones judiciales posteriores, UGT ya no realiza esa tradicional fiesta. Ahora, simplemente se organiza una caseta en la que los afiliados o quienes lo deseen deben abonar la cantidad correspondiente al consumir. No obstante, cabe preguntarse si es lo más acertado que los sindicatos se adjudiquen una o varias casetas tras el caso de 2010.
«UGT tenía una costumbre, como otras empresas, de celebrar una cena con los trabajadores de la organización, que consistía en distintos pinchitos de tortilla, de lomo con patatas, algún pescado, las gambas típicas de Sevilla y ninguna copa. Si alguien quería tomarse alguna, la pagaba de su bolsillo», explicaba el que en 2014 era líder de UGT Andalucía, Francisco Fernández Sevilla, que acabaría dimitiendo por el escándalo de las subvenciones. Por aquel entonces, el líder del sindicato justificó los gastos como «jornada institucional de trabajo».
No obstante, que cada uno pagaba las copas de su bolsillo es una versión que no coincide con la de algunos de los trabajadores del sindicato, que reconocieron que eran los líderes de UGT los que les proporcionaban tickets para consumir bebidas alcohólicas. Quien sustituyó en funciones a Fernández Sevilla tras su dimisión, Manuel Ferrer, calificó de «anecdótico» el escándalo y aseguró que «realmente tampoco era una mariscada, eran unos langostinos».
En ese sentido, el actual secretario general de UGT, José María Álvarez, aseguró hace unos días que UGT Andalucía ha asumido «como nadie» la responsabilidad política ante casos que «ya están en los juzgados», en referencia a las presuntas facturas irregulares de subvenciones públicas y el caso de los cursos de formación.
«Este sindicato y UGT-A han tomado medidas, no en este congreso sino inmediatamente cuando salieron los temas, como no ha hecho ninguna organización en este país. No hemos esperado a un congreso, la dirección de UGT-A son compañeros que no tenían responsabilidad en aquel momento. Antes de que haya ninguna justicia, nosotros políticamente ya hemos tomado las decisión que había que tomar», explicó.
No obstante, no sólo los sindicatos mantienen casetas en la Feria de Abril de Sevilla, sino también numerosos partidos políticos, entre ellos el Partido Socialista, el Partido Popular, el Partido Andalucista y el Partido Comunista de España (PCE).
«No basta con cambiar al secretario general»
Desde la Unión Sindical Obrera (USO) siempre han criticado la gestión de UGT y CCOO en Andalucía. «En tiempos pasados recientes, esos sindicatos se apropiaron de recursos ajenos y optaron por el despilfarro», explican. USO señala que «la corrupción en la que estaban metidos les ha llevado a hacer un reajuste» y espera «que cambien el rumbo», pero asegura que UGT «ha dejado el sindicalismo herido de muerte».
«Nos consta que ha salido un cambio estructural, pero ahora hay que verlo en la práctica. A UGT le quedan muchos años por delante para saldar su deuda con las administraciones públicas» explican desde USO.
La Unión Sindical Obrera valora el cambio de rumbo, pero insiste en que «no basta con cambiar de secretario general». USO defiende que «quien mete la mano en la caja tiene que pagar» y sostiene que «hay que exigir a todo el mundo lo mismo».